7 consejos sobre cómo prevenir el mal aliento
Lamentablemente, el mal aliento afecta a varias personas y por las más diversas razones, y muchas veces los propios individuos no son conscientes de que tienen halitosis, ya que se acostumbran a su propio olor. La halitosis se caracteriza por la exhalación de olores desagradables de la cavidad bucal, y existen aproximadamente 50 causas que pueden provocar el llamado aliento, como ayunos prolongados, dietas inadecuadas, calambres de amígdalas, estrés, entre otros.
Si bien las personas usan dulces, chicles o productos específicos que enmascaran el mal aliento, existen actitudes más definitivas que efectivamente hacen que se detenga por completo o al menos se controle. Entonces, aquí hay algunos consejos sobre cómo combatir el mal aliento, desde los más básicos hasta los más drásticos:
1 – Lo básico: cepillo de dientes e hilo dental
La boca contiene millones de bacterias, con cientos de tipos que viven en la región. Para que tenga sentido, los científicos han estudiado menos de la mitad de las bacterias que viven en nuestra boca. Hay dos métodos muy comunes para eliminar estos gérmenes (que todos conocemos bien): cepillarse los dientes al menos dos veces y usar hilo dental a diario.
Sí, el hilo dental es extremadamente importante en la eliminación de pequeños bloques de comida. Los alimentos que comemos son los que también comen las bacterias (al menos los remanentes que quedan), por lo que cuanto menos rastros hay en nuestra boca, más difícil es que las bacterias proliferen. Los enjuagues bucales también son importantes, pero no reemplazan el cepillado y el hilo dental, recuerde esto.
2 – Limpieza de lengua y amígdalas
La lengua también contiene varios tipos de bacterias, y muchas personas a menudo se olvidan de limpiar esta región que es tan esencial. Con limpiadores de lengua (o con el dorso de ciertos cepillos de dientes), es posible cuidar esta zona de una forma mucho más específica.
El recubrimiento lingual, originado por la combinación de células, saliva y bacterias, es una de las principales causas de halitosis y, por tanto, debe combatirse con la limpieza diaria de la lengua. Además del recubrimiento lingual, es importante prestar atención a los quesos, que son pequeños bloques blancos que se forman y quedan atrapados en las amígdalas, provocando un olor muy desagradable. Por lo general, se expulsan al toser o estornudar, pero también puede eliminarlos manualmente.
3 – Bebe mucha agua
Cuando nos despertamos, es muy probable que la llamada aliento matutino manifestarse. ¿Crees que tienes un aliento más fuerte por la mañana? Esto se debe a la menor producción de saliva durante la noche, y la saliva contiene oxígeno capaz de disminuir la producción de bacterias.
Sin embargo, esta llamada aliento matutino puede ocurrir en otros momentos del día, ya sea por la mañana, por la tarde o por la noche. Su boca también puede secarse bastante durante el día, lo que resulta en una menor producción de saliva. En consecuencia, la respiración puede volverse mucho más fuerte. La recomendación más simple es beber muchos líquidos para mantener la zona constantemente húmeda e hidratada.
4 – No uses solo las tabletas
Hay muchas pastillas y mentas que pueden enmascarar los olores del mal aliento, pero no deben usarse para combatir eficazmente la halitosis. En algunos casos, el efecto puede no ser bueno. Es como si estuvieras sudado y te pusieras desodorante. El resultado final no es el esperado, ¿correcto? Además, si el caramelo en cuestión contiene buenas cantidades de azúcar, será un alimento más para que proliferen las bacterias.
5 – Hábitos alimenticios
Hay algunos alimentos que pueden provocar mal aliento, mientras que otros ayudan a mantener el equilibrio. Alimentos como las carnes rojas, el curry, la cebolla, el pimiento y el ajo son claros ejemplos que provocan el mal olor. La carne, por ejemplo, puede tener pequeñas partes que se encuentran entre los dientes y que sirven como verdadero alimento para la proliferación de bacterias. La forma es cepillarse los dientes y usar hilo dental cada vez que ingiera estos alimentos.
Además, lo que bebe también puede provocar un aliento extremadamente fuerte. Algunos ejemplos conocidos son el café, las bebidas alcohólicas e incluso algunos refrescos. Si no quiere estar sin ese café fuerte antes de ir a trabajar, beber un vaso de agua poco después puede ayudar mucho. Por otro lado, existen bebidas que ayudan a mantener un aliento saludable, ya que tienen componentes antibacterianos, como es el caso del té verde.
6 – Dejar de fumar
Esto no es ningún secreto: fumar es una de las principales causas del mal aliento. Además de que los cigarrillos liberan diversas sustancias químicas que dañan el cuerpo, pueden ocasionar problemas graves en los dientes y las encías. Los fumadores son más susceptibles a la formación de placas, que también ayudan a la proliferación de halitosis.
7 – Visita al dentista
Si todas las recomendaciones enumeradas aquí ya están presentes en sus hábitos diarios, pero aún tiene mal aliento persistente, consulte a un dentista. Existen causas médicas que pueden provocar halitosis, e incluso si sigues las indicaciones antes mencionadas, puedes desarrollar un mal olor en la boca.
Solo un profesional podrá analizar mejor tu caso y definir cuál es realmente el tratamiento. El estrés y ciertos tipos de medicamentos, como los antidepresivos, también pueden causar mal aliento, por lo que deben tenerse en cuenta todos estos factores.
Además, las visitas periódicas al dentista (al menos dos veces al año) garantizan limpiezas que ya ayudan mucho a mantener la salud bucal. Los dentistas suelen eliminar todo el sarro y pueden identificar las enfermedades probables antes de que se vuelvan más fuertes. La prevención es la palabra clave.
* Publicado en 29/8/2014