7 datos interesantes sobre los sueños y las pesadillas
Te da sueño, tu cabeza golpea la almohada y todo tu cuerpo se apaga inmediatamente, ¿verdad? Mas o menos. Algunas células cerebrales continúan funcionando activamente y son responsables de los sueños, ya sean buenos o malos. Pero, ¿por qué algunas personas tienen pesadillas mientras que otras tienen una noche maravillosa?
Como el sueño, los sueños son fenómenos misteriosos. Sin embargo, a medida que los científicos de hoy pueden explorar nuestras mentes más profundamente, están encontrando algunas respuestas a esta pregunta. Algunas preguntas respondidas son muy curiosas. Conoce a 7 de ellos con nosotros.
01 – Los sueños son muy importantes
Los sueños pueden proporcionar información importante sobre nuestros pensamientos. Por ejemplo, si estás pensando constantemente en comprar una casa o en la posibilidad de tener un accidente, puedes estar seguro de que todo esto aparecerá en tus sueños. Es decir, quien te hace tener buenos o malos sueños eres tú mismo.
Este fue el resultado de un estudio publicado en la edición de febrero de 2009 de la Revista de Personalidad y Psicología Social. Las personas que participaron en esta encuesta también informaron que los buenos sueños traían a sus seres queridos, mientras que las pesadillas iban acompañadas de personas que no les agradaban.
“La interpretación del significado de los sueños de cada persona varía mucho”, dijo Carey Morewedge, profesor asistente de la Universidad Carnegie Mellon. “Nuestra investigación muestra que las personas creen que sus sueños proporcionan datos significativos para ellos y su mundo”.
02 – Los sueños violentos pueden ser señales de advertencia
Como si las pesadillas no fueran suficientes para aterrorizar a alguien, un raro trastorno del sueño hace que algunas personas actúen fuera de sus sueños, por ejemplo, con sacudidas violentas, patadas y gritos. Eso solo es suficiente para que busque un experto e informe lo que está sucediendo mientras duerme.
Pero aún más preocupante es el hecho de que estos sueños violentos pueden ser una señal temprana de trastornos cerebrales, incluida la enfermedad de Parkinson y la demencia, según una investigación publicada en línea el 28 de julio de 2010 en la revista Neurology.
Los resultados sugieren que las primeras etapas de estas enfermedades neurodegenerativas pueden comenzar décadas antes de que un médico pueda diagnosticarlas en una persona. En otras palabras, más que atemorizantes, los sueños violentos pueden ser preocupantes.
03 – Los bohemios tienen más pesadillas
Quedarse despierto hasta tarde tiene su diversión y sus ventajas (siempre que no tenga que esperar al despertador del día siguiente), pero los dulces sueños no forman parte del paquete. Una encuesta publicada en 2011 en la revista Sleep and Biological Rhythms reveló que las personas nocturnas tienen más probabilidades de tener pesadillas que las diurnas.
En el estudio, se evaluó a 264 estudiantes universitarios. Calificaron sus pesadillas de “0” (nunca) a “4” (siempre). Los estudiantes de la tarde obtuvieron un puntaje de 2.10 contra 1.23 para los estudiantes de la mañana. Los investigadores dicen que la diferencia es bastante significativa, pero no están seguros de qué está causando este vínculo entre los hábitos de sueño y las pesadillas.
4 – Los sueños nos ayudan a resolver problemas
Deirdre Barrett, psicóloga de la Universidad de Harvard, presentó su teoría en 2010 a la Asociación de Ciencias Psicológicas en Boston y reveló que nuestras horas de sueño pueden ayudarnos a resolver los problemas que nos acosan a lo largo del día. Es el aspecto visual y a menudo ilógico del sueño lo que los hace perfectos para pensar en lo que se necesita para resolver estos acertijos.
“Cualquiera que sea la situación en la que nos encontremos, trabajamos constantemente para resolver nuestros problemas”, dijo Barrett, y agregó que si bien los sueños pueden tener significado para otro propósito, probablemente se hayan perfeccionado con el tiempo para varias tareas, incluida la ayuda a restablecer el cerebro y nos ayuda a resolver problemas.
05 – Los hombres sueñan constantemente con el sexo
No es de extrañar hasta ahora: es más probable que los hombres sueñen con el sexo que las mujeres. Es más probable que tengan pesadillas vívidas. Este es el resultado de una investigación doctoral realizada por la psicóloga Jennie Parker, de la Universidad del Oeste de Inglaterra, informada en 2009.
En su estudio de casi 200 hombres y mujeres, de entre 18 y 25 años, Parker descubrió que las mujeres sueñan mucho con ser perseguidas, perder a un ser querido o tener sueños confusos. Son más propensos a reportar pesados que los hombres, concluye el psicólogo.
Eso no significa que las mujeres no se diviertan en sus sueños. Un estudio presentado en 2009 reveló que, en unos 3.500 casos de sueños femeninos, el 8% de ellos contienen alguna forma de actividad sexual relacionada, como el acto sexual en sí, los besos y las fantasías.
06 – Puedes controlar tus sueños
Según Jayne Gackenbach, psicóloga de la Universidad Grant MacEwan en Canadá, si estás interesado en tener sueños lúcidos, juega un videojuego. Por supuesto, una cosa no tiene mucho que ver con la otra, ya que los juegos son computadoras y los sueños surgen en la mente humana, pero ambos pueden controlarse.
“Si los jugadores están acostumbrados a controlar sus entornos de juego, también podemos hacer sueños”, dijo Gackenbach. Su investigación ha demostrado que los jugadores frecuentes tienen más probabilidades de tener sueños lúcidos en comparación con aquellos que no juegan en absoluto.
También pueden influir mejor en tus sueños, al igual que controlan un juego. Este nivel de control puede ayudar a las personas a salir de pesadillas aterradoras, incluso ayudando a los veteranos de guerra que sufren un trastorno de estrés postraumático después del combate.
07 – Los sueños pueden ayudar a calmarse
Los científicos de UC Berkeley informaron en una edición del 23 de noviembre de 2011 de Current Biology que durante la fase del sueño del sueño (también llamada REM), los cerebros de los participantes de la investigación mostraron niveles reducidos de ciertas sustancias químicas asociadas con el estrés.
“Al reprocesar experiencias emocionales previas en este entorno neuroquímicamente seguro de bajo nivel de norepinefrina, nos despertamos al día siguiente y estas malas experiencias se suavizaron en su forma emocional. Nos sentimos mejor con ellas, sentimos que podemos manejarlo todo”, dijo el investigador Matthew Walker, profesor de psicología y neurociencia.