Al igual que con el tocino, otro ingrediente mágico que tiene el poder de hacer que todo sepa mejor es el ajo. De hecho, tiene algunas ventajas sobre el tocino sabroso y graso, ya que esta famosa bombilla no solo ahuyenta a los vampiros, sino que también tiene varias propiedades medicinales. Sin embargo, como ocurre con algunos medicamentos, el ajo también tiene un efecto secundario: ¡aliento! ¿Pero sabes por qué aparece?

Según la Sociedad Química Estadounidense, hay cuatro compuestos volátiles en el ajo: disulfuro de dialilo, sulfuro de metil-alilo, disulfuro de metil-alilo y alil mercaptano, tres de ellos del azufre, que serían los responsables de provocar el famoso aliento. Lo curioso es que estos compuestos solo aparecen después de cortar o triturar los dientes.

aroma inconfundible

Cuando esto sucede, es decir, cuando se daña la estructura del ajo, la aliína presente en los dientes se convierte en alicina, la culpable del olor característico, y es la descomposición de la alicina la que da lugar a los otros cuatro compuestos que tenemos. ya he mencionado. De estos cuatro, el sulfuro de metil-alilo es el que más tiempo tarda en ser metabolizado por nuestro organismo.

Este compuesto se absorbe primero en el tracto gastrointestinal y luego ingresa al torrente sanguíneo. El sulfuro de metil-alilo es excretado por algunos órganos, específicamente los riñones, los pulmones y la piel, y el cuerpo puede tardar hasta 24 horas en eliminar este compuesto por completo. Pero, ¿qué podemos hacer para paliar el aroma a ajo que parece adherirse a nosotros?

antídotos naturales

Los estudios han demostrado que existen algunos alimentos que pueden ayudar a atenuar ligeramente el olor, como la leche, las manzanas, las espinacas, la menta y el perejil. Su mecanismo de acción aún no se comprende completamente, pero los investigadores creen que quizás sean las enzimas de estos productos las que ayudan a degradar los compuestos volátiles del ajo.

Pero antes de dirigir tu ira contra los elementos que provocan el característico aliento, debes saber que están relacionados con las propiedades antibacterianas del ajo. Los compuestos orgánicos que contienen azufre, como el sulfuro de dialilo, el disulfuro de dialilo y el trisulfuro de dialilo, presentes en los dientes de ajo, pueden penetrar a través de la membrana celular de las bacterias y combinarse con algunas enzimas y proteínas, dañando su estructura.

By memeo

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *