En el techo de la cueva Pinwheel, ubicada en el sur de California, Estados Unidos, una pintura rupestre que se asemeja a una veleta es en realidad una representación de una flor alucinógena, según un nuevo estudio dirigido por la Universidad de Central Lancashire, en Inglaterra.
Pegados al techo, los investigadores encontraron bultos fibrosos masticados de unos 400 años que contenían escopolamina y atropina, sustancias altamente psicoactivas que están presentes en el datura wrightii, planta representada en la pintura. La cueva todavía tiene el diseño de una polilla, probablemente de la especie de polilla halcón. Se sabe que estos insectos ingieren el néctar adormecedor de la flor, lo que ayuda a su polinización.
Se cree que la cueva fue utilizada por los amerindios Chumash entre los años 1600 y 1800, quienes utilizaron la planta con fines medicinales y ceremoniales. Los investigadores sugieren que la tribu se reunió dentro de la cueva después de ingerir la Datura. Según el artículo, este hallazgo es la primera evidencia clara de ingestión de alucinógenos en un sitio de arte rupestre.
Los historiadores creen que la planta se utilizó con el propósito de obtener poderes sobrenaturales para adulterar o neutralizar eventos negativos, ver el futuro o incluso encontrar objetos perdidos. También se ha documentado que los Chumash preparaban té con la flor para las ceremonias rituales de maduración de los niños.
David Robinson, jefe de investigación arqueológica, cree que los artistas responsables de las pinturas estaban sobrios cuando las produjeron, ya que sería un verdadero desafío hacerlo después de ingerir escopolamina y atropina. «Es extremadamente improbable debido a los efectos debilitantes de Datura», explicó.
Para Robinson, las ilustraciones del techo pueden haberse hecho para crear un telón de fondo, desempeñando un papel similar al de las obras de arte religiosas que se encuentran en las iglesias modernas. Mirar las ilustraciones puede haber permitido a los participantes del ritual concentrarse mientras las drogas se asentaron en sus cuerpos en una experiencia verdaderamente compartida.
El dibujo que ilustra Datura mide unos 10 por 18 centímetros y fue descubierto en 1999 por trabajadores que entraron en la cueva. Robinson también cree que la pintura pudo haber sido hecha en homenaje a la planta sagrada. “Están adorando a la planta, diciendo: ‘¡Esto es genial!’
Sin embargo, el lugar no era solo un espacio ritual. Los arqueólogos también descubrieron un «enderezador» de flecha y punta de proyectil en la cueva, lo que sugiere que también se usó para preparar el juego. Además, también se encontraron restos de animales y semillas, lo que indica que los Chumash también usaban el lugar para almacenar y preparar alimentos.