Las personas alérgicas ciertamente han estado mirando un bocadillo y se preguntan si sería palmito o camarones, ya que una reacción alérgica suele ser bastante desagradable. ¡La garganta se cierra, todo el cuerpo pica y la sensación es terrible! Sin embargo, ¿sabías que muchas personas dicen que son alérgicas a algún tipo de alimento sin serlo realmente?
Al menos esa es la conclusión de los investigadores de la Northwestern University, Chicago, EE. UU. Según una encuesta de 40.000 estadounidenses, al menos 4.000 (10%) eran alérgicos a algún tipo de alimento. Sin embargo, el 19% de las personas que juraron tener restricciones dietéticas ni siquiera desarrollaron síntomas de alergia al ingerir los supuestos desencadenantes de sus alergias.
Según los médicos que coordinaron la investigación, es probable que la persona sea intolerante a cierto tipo de alimento, pero no necesariamente alérgico a éste, ya que esta es una situación que puede llegar a poner en peligro la vida. Otra posibilidad sería que, tras ingerir un alimento de origen dudoso o caducado, la reacción del estómago se haya malinterpretado como una alergia.
El dolor de estómago y las náuseas pueden aparecer en una reacción alérgica, pero es común que se presente urticaria y picazón, con hinchazón y la posibilidad de cerrar la garganta, una situación que puede ser fatal. La investigación norteamericana señaló que los alérgenos más comunes son los mariscos, la leche y el maní.
Otro factor importante es saber que la alergia no siempre es hereditaria. En muchos casos, aparece a lo largo de la vida adulta, incluso con el consumo de sustancias que hasta entonces no hacían ningún daño. La eliminación de alimentos de la dieta solo debe realizarse bajo supervisión médica y después de demostrar que son nocivos para la salud. Sin consultar al Dr. Google, ¿eh? ¡Busque un experto!